2º enemigo del amor (segundo artículo de 10). Una imagen negativa puede ser tu peor enemigo en el amor. Dime cuánto te amas y te diré cuánto eres amada.
Si la imagen de ti misma que tienes es pobre, mediocre, decepcionante, lo más probable es que los demás te vean de manera similar.
Si no crees que mereces ser amada porque no te amas a ti misma, las posibilidades de experimentar el amor de otras personas decrecen.
La autoimagen es la imagen que nuestro subconsciente tiene de nosotros mismos que manipula nuestra personalidad, nuestro comportamiento y es responsable de lo que somos y de lo que hacemos con nuestra vida.
Si te dices a ti misma “soy tan poca cosa que nadie se va a fijar en mí”, eso mismo sucederá porque caminarás con un escudo defensivo que impedirá el ingreso de otras personas a tu corazón.
Para cambiar la forma en que te miras y te defines, para gustarte y amarte, tienes que descubrir tu identidad en lo que tu Creador dice de ti. Esta es la búsqueda espiritual más importante de tu paso por la tierra. Dedícate a experimentar el amor incondicional que Dios siente por ti. Si Él te ha creado. Si Él te acepta y ama tal y como eres, ¿quién eres tú para no amarte?
También es recomendable establecer un diálogo con tu interior, con el conjunto de ideas, motivaciones y sentimientos que tienes en tu mente. Es un ejercicio intelectual complejo y laborioso pero que bien vale la pena. Puedes acudir a la meditación, introspección, análisis crítico o incluso algún tipo de terapia como el psicoanálisis.
Amarte como Dios te ama es tu primera tarea, para luego amar a otros y ser amada plenamente.
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