PREGUNTA: Doctora, ya tengo más de 45 años de edad y siento que necesito hacerme algo en mi rostro para que no se vea tan demacrada, estoy en duda si me pongo rellenos dérmicos, que son Botox, ácido hialurónico, etc. o me hago un lifting. ¿Qué me recomienda? ¿Cuál sería las ventajas y desventajas tanto de los rellenos dérmicos como de una cirugía plástica invasiva, como lo es un lifting, por ejemplo?
RESPUESTA: Existen varias formas y tratamientos para tratarnos nuestro rostro a medida que envejecemos. En primer lugar, quiero recomendarte que la mejor forma de retrasar los efectos de la edad en tu piel es tomar mucho liquido, descansar y dormir al menos siete hora cada día, porque la privación del sueño no solo trastorna nuestro rostro, también puede producir accidentes cerebrovasculares.
Respecto a los tratamientos, es importante una evaluación exhaustiva para decirte cuál es lo mejor para ti, porque todo el mundo envejece de diferentes formas, dependiendo de sus factores genéticos y medioambientales.
Existen diferentes métodos para tratar el envejecimiento, dependiendo de las necesidades individuales como el Botox, que es adecuado para la expresión de la frente, porque paraliza el musculatura de esa área.
También tenemos mi favorito, que es el Profhilo, que es un tratamiento de ácido hialurónico de alta y baja densidad, que al aplicarlo produce una hidratación profunda en la dermis, incrementando el aumento de colágeno, por lo tanto aumenta la elasticidad y disminuye el envejecimeinto.
También tenemos el relleno de ácido hialurónico para cuando tienes líneas muy marcadas y necesitamos rellenarlas, y por último el plasma con plaquetas, que es un tratamiento espectacular que no poduce reacción, porque proviende de nuestra propia sangre extraída, desde la cual se extraen factores de crecimiento, lo cual produce la formación de colágeno.
Respecto a cirugías quirúrgicas, si tenemos el cuello, la cara o músculos faciales caídos entonces sí necesitaremos un levantamiento completo de la cara, pero de nuevo, todo dependerá de los factores genéticos, ambientales o necesidades de cada paciente.
¡Suerte!
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