Mi propósito siempre es que te sientas más segura de ti misma, que puedas hacer grandes cambios, tomar decisiones importantes y mejorar la calidad de tu vida, por ello hoy el tema es ¡volver con tu ex!, ¡darle una segunda oportunidad! ¿Se puede así de fácil?
Dime, ¿le darías una segunda oportunidad a una relación que acabó? Digamos que terminaste con tu pareja por las razones que sean lo dejaste porque te fue infiel o porque era un vago irresponsable y llego el momento en que dijiste: «Merezco algo mejor».
Pero de pronto ocurre que el susodicho regresa para pedirte una oportunidad, flaqueaste y le diste la oportunidad. ¿Te ha pasado?
Claro que te ha pasado, a todas nos ha ocurrido lo mismo. Todas en algún momento hemos dado una segunda oportunidad. A mí me ha pasado y recuerdo haber pensado «pero qué tonta fui al haberle dado otra oportunidad».
Pero también existe el lado opuesto, cuando vuelves y funciona, eso es raro, pero sucede. Este es el punto en este artículo: Cuándo debes dar una oportunidad y cuándo no.
La razón del tema de hoy es porque en días pasados recibí una notificación que me decía que tenía un paquete en el correo y al ir a recogerlo, resulta que era de una amiga de Los Angeles.
Era una caja ¡que estaba fría! y dije «a lo mejor me envió unos pasteles puertorriqueños» pero no, al abrir la caja me encuentro con una invitación de boda hecha en chocolate, ¿te imaginas? ¡Yo no sabía que existían invitaciones así.
Era una lasca de chocolate ancho y en crema de vainilla blanca estaba inscrito: Acompáñanos en la dulce celebración de nuestra boda, y a continuación estaban los nombres de mi amiga y del novio, el lugar de la boda, la hora, etc. ¡Qué cosa más fina de este mundo!
Te digo algo, me soprendió la invitacion de chocolate porque nunca había visto algo así pero más me sorpendió, y me quedé boquiabierta cuando leí con quién se iba a casar mi amiga ¡con su ex!, el hombre con el que ya había terminado más de tres veces y dije ¿cómo es posible?, si yo me acuerdo, como si fuera ayer, que ella me dijo «¡Con ese hombre yo no vuelvo ni loca!» y también me advirtió: «María si vuelvo con él, por favor me das con un palo en la cabeza, es más, si vuelvo con él retírame tu amistad». De hecho pensé en hacerlo pero se supone que las amigas nos debemos siempre apoyar en todo momento.
Recuerdo que la primera vez que mi amiga se alejó de este hombre fue por los celos. La celaba por todo. No quería verla ni con las amigas, no importa quien fuera y menos con algún hombre, le daban unos celos intensos, así que esa fue la razón por la que se dejaron la primera vez. Y adivina por qué rompieron la segunda vez, ¡por la misma razón! ¿y la tercera vez? También por lo mismo, ¡claro está!
Los celos siguieron durante las tres oportunidades que mi amiga pero cuando ya no soportó fue cuando le hizo una escena de celos ¡frente a su jefe! ¡imperdonable! Estaban en la fiesta de Navidad, mi amiga y su pareja (el celoso) y de pronto el jefe de ella la invita a bailar una salsa, era una bobería pero ustedes saben, un hombre poderoso, claro que bien guapo, y de pronto el celoso se acerca a ellos y le dice, mirando al jefe de mi amiga: «Me voy, ya que estás bien acompañada». ¡Qué vergüenza!
Esa vez, ella me dijo muy convencida de sí misma, bien segura: «No vuelvo con él» pero luego él le envió un email a ella pidiéndole perdón, prometiendo que iba a cambiar, que ya no iba a ser celoso y ella no le respondió, lo bloqueó en su celular, lo sacó de su lista de amigos de Facebook, tal como tienes que hacer cuando cortas con una relación, detener toda comunicación pero un día, el hombre se apareció en la puerta de su casa, llorando arrepentido, conmoviendo el corazón de mi amiga, y volvió con él por supuesto.
Y es que nosotras, y los hombres también, somos bien fuertes cuando tomamos la decisión de dejar a a alguien que no nos conviene, pero qué débiles somos cuando esas persona vienen a rogarnos, ahí es cuando nos derretimos.
Y ahora yo me pregunto, ¿qué cuento le habrá hecho este hombre para convencerla de que volvieran, incluso para que decidiera casarse con él? No lo sé porque no he hablado con ella pero todo esto me hace reflexionar sobre las razones que debemos tener para no dar nuevas oportunidades a un ex.
Y es que dar una oportunidad es algo normal, porque cuántas veces hemos escuchado de parejas terminan y vuelven, todo mundo merece una oportunidad porque pudo haber un malentendido, o resulta que no se conocían bien, o tal vez no estaban comprometidos suficiente y uno de los dos cometió un error, que de hecho a mí me pasó.
Yo estaba saliendo con un chico, teníamos había una conexión y química espectacular, así que rápidamente creí que era una relación exclusiva. Ese hombre me llamaba y nos veíamos todos los días, así que asumí que era la única. Yo decía: «aquí no hay cabida para otra mujer». Pues bien, resulta que me fui de viaje y me entero que alguien lo vio saliendo con una chica, imagínense, quedé bien decepcionada y terminé la relación.
Sencillamente lo dejé, lo bloque en cualquier comunicación y cuando volví a hablar con él me dijo: «Perdóname, no sabía lo serio que considerabas la relación, cometí un error pero quiero que tengamos una relación comprometida, si tú la aceptas, esta es una relación seria hasta que tú quieras» ¡y volvimos!
Las oportunidades se dan cuando valen la pena pero cuando alguien no te cumple o te decepciona en dos ocasiones o más, ten por seguro que ese comportamiento se va a cumplir una y otra vez, así que no pierdas tu tiempo.
Amiga, si estás pensando en dar otra oportunidad a tu ex, revisa si tu relación terminó por una de estas razones. Si tu respuesta es SÍ a cualquiera, olvídalo, mándalo a volar no vale la pena dar una segunda oportunidad:
Si la última vez que terminaron fue porque tú no eras su prioridad, siempre había algo más importante que tú, ya sea que su trabajo, su negocio, los amigos, los juegos. Si se dejaron por ello, créeme, nunca vas a ser la número 1 en su lista.
Si se dejaron por celos excesivos obsesivos e infundados, como los celos de la pareja de mi amiga, no des otra oportunidad. ¿Y cuáles son los celos infundados? Pues cuando la persona te cela por cosas que se imagina pasarán, cuando nada es cierto.
Si la razón por la que lo dejaste fue por abuso físico, verbal o emocional… cualquiera de estas tres razones no es para dar segundas oportunidades. Tan simple como eso.
Si terminaste con tu pareja por un vicio: alcohol, drogas, juegos, apuestas, etcétera. Resulta que vuelve a caer una y otra vez y tú lo perdonaste siempre, recuerda que aquí puedes tener un problema tú de codependencia. A menos que una persona esté dispuesta a buscar ayuda, es ridículo estar con alguien que tiene un vicio, porque tú no puedes curarlo. Esa persona debe tomar la decisión de ayudarse por sí mismo.
La razón por la que se dejaron es porque te fue infiel, y si ya le diste otras oportunidades, estoy segura que te lo volvió a hacer. Yo personalmente no podría perdonar una infidelidad porque con esto se acaba la confianza, la cual es una de las bases más importantes para tener una relación saludable.
Sé que muchas podrán decirme: «María, una persona puede cambiar», «el alcohólico, el infiel, el celoso, todos pueden cambiar» pero ¿te digo algo? Sí, la gente cambia, yo soy motivadora y uno de mis objetivos es ayudar a que tú cambies para mejorar, el problema es que tu EX no va a cambiar si sigue contigo.
¿Por qué? Digamos que ese hombre es un celoso empedernido. Seguro en la siguiente relación no será así, porque se dio cuenta que por ello te perdió, que eras lo más valioso de su vida pero si sigues con él, si lo perdonas, él no va a cambiar porque sabe que le darás más oportunidades.
¡Ojo! La gente no cambia con quien permite que lo pisotee pero una vez que lo dejes, cambiará, será otro pero en la siguiente relación que tenga, NO contigo, lamentablemente.
No cometas el error de volver con tu ex si terminaste con él por una de las razones que te señalé antes y recuerda el dicho: Si fuiste feliz con la persona equivocada, imagínate cómo será con la persona indicada.
Te invito a que te valores, que te des cuenta que mereces lo mejor y que te des la oportunidad de ser feliz en la vida.
