Hay personas a las que la Navidad les provoca tristeza, melancolía y nostalgia. Añoran épocas mejores, familiares o personas significativas que han perdido, parientes que han emigrado, la tierra que han dejado atrás, etc.
Tal vez te esté pasando a ti que me lees. Puede ser que todavía estés en duelo por la pérdida de un ser querido. Puede que estés viviendo la llamada «depresión blanca”.
Tal vez no logras olvidar a quien amaste y ya no está en tu vida. Este es el caso de un ex, por ejemplo, sobre todo si la ruptura fue decidida por esa otra persona.
Te puede molestar la música, esos alegres villancicos y Christmas Carols que te recuerdan que «It’s the most wonderful time of the year» (es la época más maravillosa del año). Te fastidia la algarabía de las decoraciones y celebraciones. Mucho antes de que lleguen las fechas ya empiezas a temerlas. Así empieza tu ansiedad y nostalgia por lo que pudo ser y no fue.
Evitar las situaciones de celebración no resuelve el dolor, lo aumenta o hace crecer con el tiempo. Dar espacio a la tristeza va a ser fundamental, pero también intentar no quedarse enganchado en ella.
En el caso de la pérdida de un ser querido por fallecimiento, conviene hacer una reunión familiar previa a las fechas navideñas para «ensayar» y ver cómo se sienten ante la ausencia del ser amado. Es importante que cada miembro de la familia pueda expresar cuáles son sus sentimientos respecto a las celebraciones y qué quiere hacer al respecto.
Busquen una manera simbólica y bonita de recordar a la persona ausente o fallecida a lo largo de estas fechas. Por ejemplo, poniendo una silla para él en la mesa familiar, poniendo su foto en un lugar visible, o poniendo una figura en el nacimiento que simbolice a esa persona.
Individualmente, aprende a expresar tus sentimientos y a ser asertivo. No hace falta que vayas a todas las reuniones familiares y de amigos, si no quieres. Toma tú la iniciativa: aprovecha para quedar con gente que hace tiempo que no ves. Comunícate por video llamada con los seres queridos que están lejos. Intenta ser un poco más sociable. Eso te hará bien.
Focaliza en todo lo que tienes de bueno en tu vida y no en lo que te falta.
Y no olvides que el verdadero sentido de la Navidad es espiritual y que, inclusive en medio de la tristeza y la melancolía, el Niño Jesús puede nacer en tu corazón.
La Doctora Cecilia Alegría, la Doctora Amor, es experta en el área: El tema de la tesis de su Maestría es sobre el fenómeno del Online Dating, además de haber publicado 2 libros bajo el mismo tema, y fundar y dirigir el Club de Solteros Cristianos con sede en el Sur de Florida.
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